Sobre nosotros

Sobre nosotros.

Somos un grupo de cristianos en serio, no como esos otros seudo-cristianos o cristianos en broma que abundan por ahí, pues nosotros no somos protestantes ni “ortodoxos”; no somos payasos blandos como esos evangélicos, anglicanos o pentecostales; ni payasos locos como “Pare de sufrir”, “Testigos de Jehová” o los mormones; ni somos tarados como los luteranos y los calvinistas; todos esos no pasan de payasos, locos, subversivos, que odian a Cristo y a su verdadera Iglesia, con su Papa legítimo, sucesor de Pedro, que hoy lamentablemente no tenemos, por estar la Santa Sede vacante. Nosotros somos un grupo de cristianos que pertenecemos a la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana, la cual es más que obvio que es la ÚNICA Iglesia verdadera, la en serio, la legítima, la que hizo Jesucristo, no Lutero, Calvino, Enrique VIII y todos esos payasos subversivos, seguidores del demonio, sino la ÚNICA Iglesia establecida directamente por Dios, quien nombró a Pedro como su Vicario.

Así que si usted es católico, ¡excelente!, eres bienvenido a esta página y ya tienes una buena parte del camino andado para tu salvación, y lo único que te falta es continuar haciendo buenas obras y viviendo lo más santamente posible; en cambio, si usted es un no-católico (o sea, un infiel), ¿qué rayos está esperando? ¡Conviértase!, pues la Iglesia católica es la única Iglesia de Jesucristo y fuera de ella NO hay salvación alguna y mire que es en serio; no es broma. Está teológicamente comprobado. Hágale caso al Magisterio de la Iglesia, pues es INFALIBLE, ya que está basado en las Sagradas Escrituras y es el único 100% libre de errores. Sí, ¡es verdad! Porque nosotros los católicos no interpretamos la Biblia como se nos antoja, como lo hacen los protestantes; nosotros—los fieles laicos comunes y corrientes—sencillamente NO interpretamos la Biblia; eso se encargan de hacerlo los Doctores, los Papas y los grandes sabios de nuestra Iglesia y el Papa hace uso de su infalibilidad papal, que en materia de doctrina NO puede fallar (eso es porque el Papa es el Vicario de Cristo) y nosotros seguimos al pie de la letra; además nosotros seguimos las escrituras en su interpretación más literal posible—como nos enseña el Magisterio—que sólo no debe ser literal, cuando la misma sea imposible (es decir cuando el Magisterio así lo indica expresamente, que es casi NUNCA). Es decir, que somos los católicos los más fundamentalistas de todos, porque somos quienes tenemos el verdadero fundamento: las Sagradas Escrituras y la Santa Tradición (el Magisterio infalible). Los protestantes que se jactan de ser los grandes fundamentalistas, mienten y se mienten a sí mismos, porque ellos no creen en dogmas como la transubstanciación, la inmaculada concepción de María, la eterna virginidad de María, la infalibilidad papal, etcétera, etcétera, etcétera.

Capaz que esto pueda sorprender a aquellos infieles, que piensan erróneamente que los católicos somos los cristianos más light: ¡nada más falso que eso hay!, pues en primer lugar nosotros somos los únicos cristianos verdaderos (los otros son sólo imitadores) y en segundo lugar somos los más fundamentalistas, tradicionalistas y extremistas de todos,  pues nuestra fe es íntegra, pura y verdadera. No es una fe berreta, blanda y mentirosa, como la de los protestantes, cuyas “misas” (burdas parodias de la Santa Misa Católica de San Pío V) son totalmente vacías, carentes de Sacramentos. En esta página y otras aledañas, usted podrá comprobar la abismal diferencia entre un cristiano verdadero (católico) y un imitador de cristiano (protestante u “ortodoxo”; estos últimos por lo menos, son mejores imitadores, pero siguen siendo imitadores). Usted notará que los cristianos verdaderos somos fundamentalistas extremistas, ultra-montanos, tradicionalistas, creemos en la vida eterna, en la resurrección de los muertos, en el perdón de los pecados (aunque la mayoría se vaya al infierno, infelizmente y más en estos nefastos tiempos), somos creacionistas, geocéntricos, decimos que el “holocausto judío” es puro holocuento, nos encanta y apoyamos totalmente a las monarquías medievales, absolutas o los regímenes autoritarios católicos (como Franco, Salazar, Bordaberry, Pinochet, etcétera), odiamos los partidos políticos y su partidocracia, detestamos la democracia liberal, detestamos el comunismo, el capitalismo y el anarquismo ateo por igual, estamos contra el aborto, contra la eutanasia, pero no nos oponemos a la pena de muerte y a las toreadas, estamos contra la marihuana y en general todas las drogas, excepto el alcohol (y algunas otras como café, mate, etcétera…), estamos en contra la sodomía y la herejía de cualquier tipo, creemos que la ciencia y la filosofía deben avanzar obedeciendo los dictámenes de la Iglesia, creemos en el nihil obstat, en la mano morta, en las lettres de caché, y todas esas herramientas tan útiles para la Iglesia y la Monarquía; nos encantan las Cruzadas Santas, la Santa Inquisición, la pacificación de los indios, el Imperio Español, las Cristiadas, etcétera, etcétera, etcétera, pues apoyamos todos y cada una de las grandes hazañas de la Santa Iglesia, sin renegar de alguna de ellas, pues sabemos que nuestra Santa Iglesia NUNCA JAMÁS EN LA HISTORIA SE EQUIVOCÓ EN LO MÁS MÍNIMO. ¿No es estupendo? ¡Nuestra Iglesia nunca cometió errores! ¡Eso quiere decir que es la verdadera! Así, que si usted es una de esas personas que le encanta la verdad, pues entonces hermano, ¡éste es su lugar!; en cambio si usted es uno de esos seguidores del demonio, del padre de la mentira, que le gusta las mentiras, que le encanta que le mientan y le ensucien el cerebro (¡y el alma!) con mentiras indecorosas, ¡largo de aquí, infiel! ¡A la hoguera!

¡Bienvenidos hermanos en Cristo! ¡VIVA NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE! ¡VIVA CRISTO REY!